Coloca el filtro y mójalo con agua caliente para evitar sabores a papel en taza.

Después, monta la AeroPress en posición invertida y vierte agua dentro para precalentarla.

Cuando tengas todo preparado, deshazte del agua y añade tu café molido dentro de la AeroPress. Si te es de utilidad, usa el embudo que viene con la cafetera.

Es hora de colocar tu AeroPress encima de la báscula y tararla. Empieza vertiendo 100gr de agua lentamente, luego mueve todo el café con movimientos muy suaves en cruz. ¡Ten cuidado de no crear turbulencia!

En el 00:30 continúa vertiendo lentamente 125gr más de agua, llegando a 225gr de peso final.

Encaja bien la pieza del filtro en la base de la cafetera y saca el aire presionando con mucho cuidado.

Cuando el cronómetro llegue a 01:20, es hora de darle la vuelta a tu AeroPress suavemente y colocarla en la jarra. Presiona inmediatamente durante 30 segundos y cuando escuches un siseo, para.

Voilà, ¡ya tienes listo el café! Anímate a llevar contigo tu AeroPress durante los viajes, es súper práctica 🙂